Picnics suena más anglosajón, pero a nosotros nos gusta llamarlo comida campestre, tapeo de campo o picoteo. Lo importante es no complicarse la vida mucho con los preparativos y salir al aire libre casi con lo puesto. Preparar algunas ensaladas, sándwiches, frutas o limonadas. Cualquier comida sana que nos permita disfrutar de estos reencuentros con amigos y familia. Cuando llega el buen tiempo, todos nos llaman para que organicemos estas comidas en el campo, y nosotros encantados.
Como el ritmo en el huerto en estas fechas es frenético, habitualmente compartimos trabajo y cada uno trae algún plato. ¿Os doy ideas? Ensaladas como es lógico todas las que quieras. Yo soy más partidaria de hacerlas de pasta, legumbre o arroz para que sean más contundentes y completas. Sándwiches vegetales, y quien quiera de salmón con aguacate y rúcula que es de míos preferidos. Las quiches o empanadas también son buena idea. Pero sin duda alguna, mis platos estrella en la temporada de primavera, son las habas cocidas con hierbabuena y el humus de la legumbre que sea. Unas crudités de rábanos, apio y zanahoria y os garantizo que tendréis la comida perfecta.
Muchos no tendréis acceso al campo tan fácil como lo tenemos nosotros en esta tierra, pero cualquier parque o jardín es bueno, e incluso la playa para quien pueda. Hasta una terracita si me apuráis, lo importante es compartir estos momentos y disfrutando del buen tiempo.
La primavera es la mejor estación para acercarse al campo y descubrir la importancia de estar cerquita de la tierra. Hacer un picnic es una genial idea para comer de forma saludable, reencontrarse con amigos y disfrutar de la naturaleza.