El cultivo ecológico es muy complicado en estos días en que queremos correr tanto. Se requiere paciencia y tesón. En el campo y en los cultivos no podemos correr más de la cuenta. Debemos respetar los tiempos que nos marca la naturaleza. Para que os hagáis una idea los tomates que cultivamos tardan unos seis meses en crecer. Pero no os asustéis. Nosotros los sembramos desde la semilla y esa es la parte más complicada. La germinación del tomate hasta que crece lo suficiente para poder plantarlo en vuestro huerto o jardín puede oscilar entre los 2-3 meses. Afortunadamente ahora podéis encontrar todo tipo viveros y tiendas especializadas donde podéis encontrar plantones de tomates ecológicos listos para sembrar.
Se trata de un cultivo de verano como sabéis. Requiere calor, agua y comida (tierra) poco más. Por eso os aconsejo que si no tenéis huerto o jardín, os hagáis con un buen macetón con buena tierra abonada y allá que lo vamos a trasplantar.
No requiere mucho cuidado, pero si mimo constante. A las plantas hay que mirarlas a diario y aprender a ver qué necesitan. Un golpe de calor puede acabar con todo el trabajo y dejar nuestra ensalada sin un tomate ecológico sabroso que aliñar. Así que debemos comprobar que no le falta nunca agua y veréis cómo crece la tomatera.
Los cuidados más necesarios son los de podar y entutorar. De esta forma conseguiremos dos cosas. Guiar a la planta para que crezca fuerte y esbelta y al atarla al tutor, evitaremos que el peso no la consiga tronchar. Al podar el tomate desprende una sustancia verde que os manchará los dedos pero no os va a importar. Os llegará ese olor a tomate que últimamente es muy difícil encontrar.
En menos que os deis cuenta comenzará a florecer. La flor es amarilla y absolutamente maravillosa. La señal de que los tomates pronto comenzarán a formarse. Poco a poco, con delicadeza y rápidamente crecerán y crecerán. Y así llegamos a su tiempo de maduración, que es fundamental. Es el tiempo en el que los tomates van cogiendo sabor. Gracias al calor del sol y a su pigmentación, empezarán a tornarse en su color. No necesariamente deben ser rojos. Hay tomates amarillos, negros, verdes, azules... y hasta blancos, tomates de mil formas y colores. Pero os garantizo que ese tomate que cultivas en casa o en tu huerto, es el más bonito, el más sabroso y el que mejor te va a alimentar.
No todo es bonito en el cultivo del tomate ecológico. Es una planta muy vulnerable a las plagas y enfermedades, aunque hay muchos remedios ecológicos para tratarla. Bacterias y animales beneficiosos que luchan con los malos, y aunque no siempre lo hacen, si los pueden llegar a ganar. Cuando muere una planta hay que reponerla con otra y de esta forma iremos comiendo y cultivando lo que toca en cada momento.
La temporada de verano es muy generosa y la mejor época para cultivar. Es muy agradecida y con nada que hagáis veréis que las tomateras os garantizaran ensaladas deliciosas que vais a disfrutar una barbaridad. Avanti con el cultivo de tomate ecológico en casa, y contadme vuestras experiencias. Seguro que os va a apasionar :)