Las claves para una buena comfort food ( o comida comfortable) son estas:
- Productos de alta calidad: Algunos tenemos la suerte de cosecharlos en el huerto, otros en la tienda de confianza donde se asegura que le proporcionarán los mejores ingredientes. Conocer a quien te alimenta es una suerte y se está convirtiendo cada vez más en un seguro vital. La confianza en la materia prima es un must. A mejor producto más fácil será triunfar.
- Tiempo y autocuidado: No te conformes con comer cualquier cosa de manera rápida. Dedícate o dedícales un tiempo de calidad a preparar un delicioso almuerzo. No hace falta esperar a que haya que celebrar algún evento. En verano que seguro tienes más tiempo, proponte pasar un rato disfrutando entre tomates, berenjenas y pimientos. La belleza natural en los ingredientes y la preparación de la receta sin prisas, te harán llevar tus pensamientos a un zona de comfort maravillosa ,que estará llena de recuerdos bonitos, y que te alimentarán tu alma, tanto o más como el plato más casero.
- Olvida Instagram y recupera recetas de antaño: Que no se pierda la cocina tradicional, esa que nutre más que ninguna. Busca y recupera recetas de amigos y familia que por favor tengan más de 2 ingredientes y que tardes más de 30 segundos en preparar. Sabéis a qué me refiero ¿verdad? Instagram para inspirarnos es fantástico, pero para recetas de calidad no nos ayuda . Estamos dejando de cocinar, especialmente las nuevas generaciones. La cocina es la esencia de cada familia, cada una a su estilo y si perdemos ese rato de compartir, alimentarnos, hablar, disfrutar, es que lo estamos haciendo, en mi opinión, regular.
No dejes de preparar recetas de siempre que nos reconforten y que huelan a casa no solo en Navidad.